Ángel Martínez Pérez "Lito" regresa al banquillo de los acusados. El conocido popularmente como el "rey de las verbenas" de Galicia compareció ayer en la Sala Número 1 del Juzgado de lo Penal de Pontevedra, acusado de dos delitos tributarios por valor de 284.000 euros de la Orquesta Filadelfia correspondientes a los años 2011 y 2012.

Durante el primer día de juicio, "Lito" se acogió ayer a su derecho a no declarar, por lo que las versiones de sus socios en la empresa Representaciones Lito, Manuel Álvaro Villamaña Méndez y Miguel Ángel García Souto, fueron los únicos que respondieron a las preguntas de la Fiscalía, la Abogacía del Estado y la Defensa.

Ambos trataron de desvincular su actividad de la de la orquesta para evitar ser condenados. Los dos encausados reconocieron que eran socios de Representaciones Lito con, aproximadamente, el 12% de las propiedad de la empresa y formaban parte del Consejo de Administración, aunque no admitieron que tuviesen "facultades mancomunadas".

Asimismo, reconocieron que esta entidad "representaba" a la Orquesta Filadelfia a nivel de "intermediación", pero que en ningún caso "llevaba la contabilidad" de la agrupación musical. "Yo me dedico a la contratación. No tenía relación con los músicos ni era el jefe de la orquesta", expuso Vlilamaña.

Por su parte, García Souto destacó que por su pasado en el mundo de las orquestas mantuvo "una pequeña relación con la orquesta", en lo que se calificó como "asesor musical" a nivel de repertorio o vestuario. "Acudí un par de veces a ensayos y alguna otra vez a alguna actuación. "En aquel momento la orquesta iba mal. Había meses con solo tres actuaciones. Simplemente aconsejé, pero nunca mandé", especificó.

Además, los dos acusados coincidieron en recalcar que no habían cobrado comisión alguna por las actuaciones de la orquesta, aunque Representaciones Lito se llevaba aproximadamente el 5% del dinero que cobraban en cada actuación las agrupaciones que representaba.

"Yo me uní a la sociedad sin tener que aportar nada. Me parecía un buen negocio pero las expectativas no se cumplieron y no gané nada. Iba a ser un medio de vida, pero no siempre sale bien", destacó García.

En otro orden de cosas, los dos acusados que intervinieron también reconocieron que conocían que la Orquesta Filadelfia estaba registrada en la Oficina Española de Patentes y Marcas y que sus nombres estaban vinculados a ella en dicha entidad. Mientras Villamaña. aseguró "desconocer" el porqué, el otro acusado explicó que aceptó que su persona se relacionase con la agrupación en el registro en dicha oficina "porque los músicos no querían y alguien tenía que hacerlo". "Había que patentar el nombre porque en esa época comenzaron a proliferar usurpadores", especificó.

Por último, los dos encausados recalcaron que desconocían la titularidad tanto de la Orquesta Filadelfia como de los medios de transporte que empleaban para acudir a las actuaciones musicales y recordaron que los músicos cobraban a través de las comisiones de fiestas que los contrataban.