Es una de las demandas históricas de la parroquia, por la que más han peleado los vecinos, pero por fin parece que se hará realidad. Verducido podría tener alcantarillado en un plazo de dos años. Al menos así se lo comunicó el Concello de Pontevedra a los vecinos en su último encuentro, a finales de verano. Esta cuestión, y otras, fueron tratadas el fin de semana en una asamblea de balance del año 2017 celebrada en la parroquia.
"Estuvimos hablando de todas las cosas que se hicieron durante el año y los temas que han quedado pendientes", explica Marcos Rey, presidente de la asociación vecinal.
El alcantarillado es uno de los que más pendientes tiene a todos los vecinos. "El Concello nos dijo en septiembre que en dos años ya dispondríamos de él y nos consta que ya están trabajando en el proyecto", celebra.
En este sentido, alguno de los vecinos se interesó en la asamblea por la posibilidad de que a la vez que se hacían las obras del alcantarillado se procediese al enganche al agua corriente. "Será una de las cosas que planteemos al Concello cuando nos volvamos a reunir", anuncia Rey.
En este sentido, en la reunión se recordó que los dos últimos compromisos del gobierno local siguen a la espera de ser materializarse. Además del alcantarillado, está la obra de asfaltado de una de las vías principales, la del Camiño de Abilleira. "Los vecinos se quejan de que este año apenas hubo inversión", reconoce Marcos Rey.
Curiosamente, y pese a ser la parroquia en la que se encuentra el embalse que abastece a Pontevedra, el de O Pontillón de Castro, determinados lugares de Verducido adolecen de problemas de agua en el sentido de que hay algunos vecinos que no tienen depósitos de aguas y tienen que compartir el uso de los de sus familiares. Los pozos propios son la solución en la mayoría de los casos, pero con la sequía de este otoño la situación se complicó y algunos de ellos tuvieron que proceder a dar más profundidad a estas minas.
Tras las lluvias de la borrasca Ana, de la sequía se pasó a inundaciones, que han sufrido algunos de los vecinos porque no hubo previsión por parte del gobierno local para limpiar las cunetas. "El Concello normalmente limpia una o dos veces al año, pero haría falta una previsión cuando llega el invierno para evitar que se produzcan atascos", matiza Marcos Rey.
La legalización del pabellón que Concello y Diputación crearon en Verducido es otra de las cuestiones que preocupa a los vecinos, ya que se está utilizando pero sin licencia.
"Tuvimos una reunión con Marea Pontevedra, que nos informó de que se ha conseguido a través de los presupuestos que se arregle el entorno de O Pontillón", añadió el presidente de la asociación vecinal.
Además de la reunión de vecinos, la parroquia celebró hace unas semanas otra, la de la comunidad de montes, en la que se trataron los principales puntos de actuación para el próximo año y se analizó el trabajo puesto en marcha en el que ya termina, en el que se invirtieron unos 30.000 euros. Entre otras cuestiones, se abordó la situación de los montes comunales para poner en marcha medidas que minimicen en la medida de lo posible el riesgo de incendios forestales.
