"A presidenta da Diputación de Pontevedra e este goberno non vai a estar calada ante o deterioro dun elemento do patrimonio tan importante como é o Pazo de Lourizán", aseguró esta mañana la presidenta del ente provincial Carmela Silva, y por lo tanto advierte de que el ejecutivo "tomará todas as medidas que sexan necesarias" para obligar a la Xunta a que rehabilite el histórico inmueble.

La primera de estas medidas ya ha sido adoptada y consiste en denunciar "la falta de cumplimiento" por parte de la Xunta de sus "obrigas de conservación" sobre el edificio noble del pazo que se evidencia en los graves deterioros que sufre el inmueble. Una denuncia que ha sido presentada hoy mismo ante el responsable de proteger el patrimonio histórico de Galicia, el secretario xeral de Cultura, Anxo Lorenzo, también dependiente de la propia administración autonómica.

El objetivo es que el organismo encargado de velar por la conservación del patrimonio histórico gallego obligue a la propia Xunta a cumplir con lo estipulado en el convenio de cesión de la finca, el pazo y el centro de investigación de Lourizán a la entonces Consellería de Agricultura, Gandería e Montes y en donde la administración autonómica se comprometía a realizar las obras de conservación para el mantenimiento de la zona noble del conjunto.

Silva matizó que, después de remitir anteriormente una carta al titular de Vicepresidencia, Alfonso Rueda, sin que obtuviera la respuesta esperada; ahora ya no se trata de una mera solicitud sino de "una denuncia" con la que se pretende "obligar" a la Xunta a que esta pieza el patrimonio sea rehabilitada. Una petición a Cultura, que es quien tiene competencias en la materia "para que se haga cumplir la ley" y se proceda a la recuperación de un inmueble que además está catalogado patrimonialmente por la legislación autonómica. Silva confía en que el secretario xeral de Cultura, actúe, dado que "é o que ten que facer, é a súa obriga", pero que si no fuera así "estudiaremos otras medidas".