"Un sacrilexio contra o ecosistema". Así definió hoy, el alcalde de Ponte Caldelas, Andrés Díaz; el proyecto para realizar un trasvase desde el río Verdugo al embalse de Eiras con el objeto de garantizar el abastecimiento de agua de Vigo y los municipios de su entorno. Andrés Díaz realizó estas manifestaciones en el marco de la manifestación de protesta contra el trasvase que discurrió entre la Alameda de Ponte Caldelas y la playa fluvial de O Verdugo y a la que asistieron en torno a medio millar de personas esta mañana.

Díaz lamentó que "a día de hoxe seguimos sen saber que é o que realmente pretenden facer no río". Aseguró que los vecinos de este pequeño municipio "están preocupados" y considera "gravísimo" y de una "falta de rigor enorme" que "lo que sabemos es por lo que leemos a través de los medios de comunicación".

El regidor socialista considera que "primero es necesario hacer una valoración y un estudio de impacto ambiental dado que no sabemos cuál es la afectación a Ponte Caldelas de esta medida". "Nosotros la estamos valorando y es una afectación importante", añadió.

Además del plano medioambiental, Díaz explica que el agua del Verdugo es un recurso que necesita el propio municipio caldelán, dado que "aquí al lado tenemos una captación de agua de la que tenemos que tirar de vez en cuando" y aseguró también que es posible que tengan que echar mano del recurso para abastecer a muchas parroquias que ahora ven como están secos ya sus propias traídas, sobre todo ante las trabas que les pone la Xunta y Augas de Galicia para realizar nuevas captaciones. "Por lo tanto, nos parece intentar vestir un santo para desvestir otro", añadió. "Creemos que no es correcto ni tolerable", zanjó.

En tercer lugar destacó también la afectación sobre el paisaje y el sector turístico, dado que las obras afectarían a la "famosa zona de los barrancos" del Verdugo, que es "un recurso turístico muy importante" y también podría tener un impacto fuerte sobre la playa de A Calzada, el único arenal fluvial con bandera azul en España.

Díaz añadió que el Concello estudiará en los próximos días posibles acciones legales para intentar también frenar el proyecto, aunque insistió en que las movilizaciones sociales son también muy importantes. En Ponte Caldelas temen que la Xunta pueda "pasar por encima" de las competencias urbanísticas del ayuntamiento declarando la incidencias supramunicipal del trasvase, que afecta a unos 12 concellos.