"La violencia contra las mujeres representa una de las lacras más graves a lo largo de la historia de la humanidad. A pesar de los avances legales, las mujeres y las niñas siguen sufriendo violencia psicológica, física, sexual y/o económica y continúan siendo asesinadas, representando la punta del iceberg de la violencia extrema", expone el manifiesto aprobado por todos los grupos de la corporación municipal de Marín, con ocasión del 25-N, día internacional contra la violencia machista.
La violencia contra las mujeres es una acción generalizada en el mundo que pretende su control, a través del uso de un poder legitimado por el sistema patriarcal, expusieron las portavoces del Concello de Marín. "La sensibilización en la sociedad sobre el daño que producen los comportamientos machistas y la interiorización en las familias del principio de igualdad como valor esencial de la convivencia son el camino para alcanzar una sociedad más justa e igualitaria", añaden.
Ayer se leyó el manifiesto en el Concello y se entregaron los premios del 25-N a las Anpas de los centros educativos, así como a Josefa Area, la poetisa marinense.
Seguidamente se realizó una marcha contra la violencia de género, en la que participaron familias enteras, para reivindicar un mundo libre de violencia, "donde hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades de ser libres y crecer sin prejuicios".
"Desde las administraciones se deberá mejorar la asistencia, ayuda y protección a las víctimas para que hagan uso de sus derechos, cuidando especialmente la intervención con mujeres del rural o con diversidad funcional", se comprometieron los representantes públicos, quienes también tienen en cuenta que "se necesita atender a la creciente violencia de género digital", ya que para la población adolescente las redes sociales son el principal medio de comunicación. Los centros educativos, como el IES Mestre Landín, dedicaron la jornada del viernes a esta temática.
