Por el momento, Pontevedra y los demás municipios de la ría aún se abastecen en exclusiva del río Lérez, ya que cuenta con margen para ello mientras no se baje de la barrera de los dos metros cúbicos. De llegarse a esos extremos, el Concello aún dispone de las reservas de la presa del Pontillón, que presenta el mejor estado de toda la red de 9 embalses de la cuenca Galicia Costa para abastecimiento. Entre los de uso hidroeléctrico o industrial solo el de Touro, en el río Ulla, está mejor que el de Verducido.

El Pontillón se encuentra a día de hoy al 85% de ocupación, lo que supone agua suficiente para abastecer a la ría durante un mes, según los cálculos municipales. En segundo lugar figura la presa del Umia, con algo más de un 64%. Al sur de la provincia, donde ya hay medidas concretas, el de Eiras está al 42%, el de Zamáns a menos de 39 y el de Baiona a apenas el 28, si bien el del río Con, que abastece a Vilagarcía, está bajo mínimos, con solo un 10% de ocupación.