El conflicto sobre la ubicación de los composteros comunitarios municipales en Monte Porreiro, con una notable división vecinal entre detractores y partidarios, supone una importante vía de agua en la linea de flotación del programa marco del BNG local para el tratamiento de basuras. El primer barrio donde se pretendía implantar de forma general este modelo de compostaje, tras más de dos años de mandato, ha quedado paralizado "temporalmente" y todo se debe a la "improvisación permanente" del gobierno local en este asunto.

Así lo denunciaron ayer el PP y el PSOE, que ya exigen explicaciones al alcalde, Miguel Fernández Lores no solo sobre la controversia surgida en Monte Porreiro sino sobre la "hoja de ruta" real que tiene el BNG al respecto. Coinciden además en que la situación actual abocará a todo el proceso al "fracaso".

Agustín Fernández, portavoz municipal socialista recordó ayer que "todo lo relacionado con el compostaje ha estado marcado por la improvisación y falta de rigor, por anuncios que nunca se materializan y por carecer de planificación".

"Las consecuencias -añade- se ven en Monte Porreiro, aplicando un modelo sin consenso social, pero puede ocurrir también en Campolongo", donde se anuncia la segunda fase. También denuncia el PSOE la total ausencia de avances con respecto a la planta de compostaje pese a que hace dos años que "se pagan 25.000 euros al año" a los comuneros de A Canicouva "por el alquiler de unos terrenos en los que no hay nada". Fernández también echa en falta un "plan de viabilidad, un estudio de costes y de repercusión económica, sobre personal y qué se hará con el compost", de ahí que trasladará todas esas dudas al alcalde y pedirá un debate monográfico sobre el asunto en comisión. El PSOE asegura que "el compostaje es una buena idea, pero hay que aplicarla con planificación".

Por su parte, el portavoz del PP, Jacobo Moreira, coincide en buena parte con los socialistas y, de entrada, exige al BNG que cancele el contrato de alquiler de A Canicouva porque "es un malgasto de dinero público. Recuerda que la elección del lugar también fue objeto de una notable polémica, que ahora se repite.

Después de resumir los "bandazos" del gobierno local sobre el compostaje, el PP lamenta la "falta de diálogo. Si Monte Porreiro pide más barrenderos, el alcalde pone composteros y si el rural pide alcantarillado, Lores pone lombos".

"Y ahora lo anuncian para Campolongo", subraya Moreira, que aconseja al gobierno local que "aprenda de Monte Porreiro y consulte a los vecinos y no nos vale que se escuden en los técnicos, como suelen hacer cada vez que aparece un problema".

Los populares emplazan al BNG a "poner el contador a cero, planificar todo el proceso y tener claro el cuándo y el dónde, consensuado con los vecinos".