El director de Augas de Galicia, Roberto Rodríguez Martínez, presidió esta mañana la reunión de coordinación con los concellos afectados por la activación de la alerta por sequía en el sistema del Lérez y de la ría de Pontevedra, en la que les trasladó la colaboración de Augas de Galicia para establecer con cada uno de los municipios objetivos y metas concretas para reducir el consumo.

El director de Augas de Galicia indicó que en la actualidad el abastecimiento a la población está garantizado, pero que este no es ilimitado y para paliar los posibles efectos de esta situación debe producirse un incremento de las aportaciones hídricas, situación que no depende de las administraciones; o bien reducir el consumo, empezando por aquellos que no son prioritarios.

Rodríguez Martínez indicó que los concellos tienen un papel fundamental en la gestión de los recursos disponibles, ya que son los gestores de la red de abastecimiento; por lo que la Xunta brindó la colaboración para analizar con la administración local que usos no son prioritarios y orientarlos en la adopción de medidas.

Tal y como les explicó el representante de la Consellería de Medio Ambiente estas serán de dos tipos: homogéneas, como el baldeo de calles, evitar el riego de jardines o reducir la presión de la red, que pueden ser adoptadas por todos los municipios del sistema; y específicas, que estarán fijadas en función del consumo de los distintos usos de cada uno de ellos. Para la toma de decisiones conjuntas "es necesario contar con la información detallada sobre los usos y consumos de cada ayuntamiento y así fijar las medidas necesarias y efectivas", concluyó el director Rodríguez Martínez.

En este encuentro, el director de Augas de Galicia explicó cuál es la situación actual del sistema (por el río Lérez circula un 95% menos del caudal habitual para esta semana del año, donde ya debería haber crecido el caudal) y los pasos que se fueron dando hasta declarar la alerta por sequía a comienzos de este mes.

En ese sentido, entre las medidas propuestas por la Xunta, destaca la limitación de la captación de Ence en el río Lérez. Con esta medida, que se quiere activar esta semana, únicamente podrá utilizar el 50% del caudal que tiene concedido, ya que los consumos industriales (diferentes al de la acuicultura o la producción hidroeléctrica, como es el caso de Ence) ocupan el puesto número cinco entre las prioridades establecidas en el Plan Hidrológico, siendo la primera el abastecimiento a la población.