Una proposición de urgencia del Partido Popular sobre obras en el rural y en los barrios se rechazó mediante el voto de calidad del alcalde, ya que la votación se empató a doce concejales a favor y otros tantos en contra. En este debate, la popular María José Rodríguez Teso recriminó al grupo de gobierno la "prepotencia, la falta de empatía" con los ciudadanos a la hora de planificar obras. "A ustedes lo que opinan los vecinos les da igual", dijo Teso, aludiendo también a las protestas que se exhibían en el patio de butacas.

La concejala de Ciudadanos, María Rey, reprochó al grupo de gobierno que tiene "un modelo de ciudad, pero no de rural, no hay modelo par las parroquias", por eso reclamó "una Pontevedra modélica para todos". Por parte del grupo de gobierno, Demetrio Gómez rechazó estos reproches asegurando que "el modelo Pontevedra es igual para todos, para el centro, para los barrios y para las parroquias.

Por unanimidad se aprobó una moción de Ciudadanos para crear una app de incidencias y desperfectos en el municipio.