Los expertos del Centro de Investigacións Forestais de Lourizán insisten en que deben ser los técnicos especialistas quienes concreten las medidas a realizar para evitar consecuencias negativas sobre los montes.

"Siempre hay que prestar atención al suelo porque es necesario saber dónde actuar", aseguró Teresa Fonturbel, edafóloga del centro pontevedrés, ayer durante la visita de la conselleira de Medio Rural a las instalaciones.

En el centro se trabaja en base a cinco tipos de indicadores visuales que permiten conocer el nivel de severidad del fuego sobre el terreno. El menos afectado es el que se incluye en el nivel "muy bajo", donde el suelo permanece inalterado y conserva su estructura y las raíces finas superficiales, ya que todavía queda mantillo y la cubierta forestal no se consumió por completo. En el otro extremo se encuentra el nivel de severidad "muy alto", con hojas y humos completamente consumidos y un suelo que perdió su estructura y está desagregado. En él no existen restos de raíces finas superficialmente. En las categorías intermedias se encuentran los niveles de severidad "bajo", "moderado" y "alto".

Superficie quemada

Los técnicos priorizan los niveles 4 o 5. En este sentido, aseguran que para establecer las prioridades de actuación es importante estimar qué porcentaje de superficie del área quemada puede quedar cubierta de hojarasca caída desde los árboles chamuscados y qué porcentaje de esa superficie quemada está afectada por cada uno de los niveles de severidad del fuego en el suelo.

Especialmente, recalcan que cualquier intervención debe ser coordinada y que hay que evitar regenerar en zonas que podrían hacerlo por sí solas. La investigadora Cristina Fernández recuerda que "cualquier regeneración que haga el suelo por sí solo siempre va a ser mejor que la que hagamos nosotros".

Las pendientes de los terrenos son uno de los condicionantes más importantes a la hora de actuar. Se establecen categorías en función de si es inferior al 20 por ciento, entre el 20 y el 40 por ciento y superiores al 40 por ciento y si es zona de arbolado o de monte raso.