El área sanitaria de Pontevedra ya no cuenta con ninguna de sus camas cerradas para la adjudicación a los pacientes por parte de los profesionales cuando así lo consideren necesario. La gerencia del Complexo Hospitalario de Pontevedra, CHOP, procedió a abrir el pasado lunes por la tarde las que todavía permanecían cerradas en Medicina Interna III, en el Hospital Provincial. Con ellas, todas las habitaciones de ambos centros hospitalarios están a disposición de las necesidades de la población.

La agrupación sindical Prosagal, representante de los trabajadores sanitarios, celebró ayer la decisión de la gerencia, que se había comprometido a abrir todas las camas en el mes de octubre, excepto nueve en la unidad de lactantes.

"Prosagal ve satisfechas sus demandas y reivindicaciones, tanto por el derecho de los trabajadores a no estar rotando cada día por diferentes unidades como por el de los usuarios a ser ingresados en su correspondiente unidad, por el bien de su salud, y porque así se descongestionan las Urgencias", asegura la formación, que a principios de mes inició una serie de movilizaciones para informar a la población y recordar a la gerencia del CHOP su compromiso de no mantener cerrada ninguna cama más allá de la época estival.

La gerencia había abierto una de las alas de Medicina Interna III la pasada semana, pero mantenía la otra inutilizada. El mes comenzó con camas cerradas tanto en esa unidad como en Neumología, por lo que el adelanto en la estación de un primer pico de la gripe complicó la situación en el área sanitaria, provocando importantes colapsos en el servicio de Urgencias del Hospital Montecelo, cuyos trabajadores vivieron jornadas caóticas.

El plan inicial de cierre de camas de la gerencia pasaba por más de un centenar entre las áreas sanitarias de Pontevedra y O Salnés. En la de Pontevedra el mayor pico tuvo lugar desde la segunda quincena del mes de julio y la primera de septiembre, con 83 camas cerradas. La mayor cantidad pertenecían a Medicina Interna III, que ahora por fin se encuentra abierta, y Cirugía, con más de una treintena. El resto se repartían entre Neumología y Lactantes.

En cualquier caso, el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, reiteró en varias ocasiones que no se trataba de un cierre irreversible, sino que las camas estaban a disposición de los hospitales siempre que las necesidades así lo dictasen.