La junta de gobierno de la Diputación provincial de Pontevedra aprobará en su reunión de esta mañana el convenio de colaboración entre la institución que preside Carmela Silva y el Concello de Barro para la ejecución del proyecto de pavimentación y dotación de servicios en la EP-0505 y N-550-Igrexa de Perdecanai, en el término municipal de Barro.

Según puso de manifiesto el diputado Uxío Benítez, esta carretera "tiene una historia negra dentro de la Diputación", ya que fue objeto de muchas fases de obra y a día de hoy aún está sin finalizar.

Para solucionar su mal estado, el alcalde de Barro, Xosé Manuel Fernández Abraldes, propuso un convenio mediante el que se pavimentará la totalidad de esta vía, en la que se instalarán cuatro "lombos" y se construirá un área peatonal y se ejecutará una nueva canalización de saneamiento con un colector de 315 mm para servicio de pluviales.

Además, indicó el diputado, se corregirá la rasante en un pequeño tramo para ajustar las entradas de las viviendas.

El presupuesto de la actuación alcanza la cantidad de 327.565,38 euros, que según se recoge en el convenio a aprobar esta mañana, se financiará al 70% por parte de la Diputación de Pontevedra, mientras que el Concello correrá con el 30% restante. Asimismo, el Concello deberá conseguir las cesiones necesarias para ejecutar la obra.

El acuerdo deberá firmarse en las próximas semanas y después se procederá a licitar los trabajos.