El Concello de Poio no contempla remunicipalizar el servicio del agua. A día de hoy, el ejecutivo poiense trabaja en un nuevo pliego para sacar a concurso de nuevo la gestión de este servicio y, en principio, será a largo plazo como el último, que fue de 20 años y finaliza en diciembre de 2017.
El regidor de la localidad, Luciano Sobral, destacó ayer que el equipo de gobierno considera que la opción "más positiva para los intereses municipales y de los ciudadanos" es seguir como hasta ahora.
"Buscaremos un contrato con las mejores condiciones posibles porque creemos que es más eficiente que la gestión la lleve una empresa especializada", aseguró.
Saneamiento
Sobral explicó que la complejidad de la gestión del agua radica en el saneamiento: "Tenemos una red con una infraestructura complicada, muy larga. Hay más de 20 bombeos y no es fácil de gestionar. Desde luego, para el Concello no lo sería".
De este modo, el alcalde aseguró que a día de hoy se podía dar por "descartado" un futuro acuerdo con Pontevedra para remunicipalizar el agua a través de una Mancomunidad, aunque admitió que estudiarían la propuesta de Díaz.
"Creemos que no es un beneficio para el servicio, sino que incluso supondría un prejuicio. Al menos al principio, porque habría que hacer nuevos contratos y adquirir más personal, algo que ahora no es adecuado", finalizó Sobral.
