El Concello de Barro decidió invertir una partida de 300.000 euros, procedente del remanente de tesorería, en varios proyectos que servirán para la mejora y la puesta a disposición de los vecinos de equipamientos así como la mejora de la seguridad y ampliación de viales, la creación de un parque infantil y un proyecto de ahorro energético en iluminación pública, entre otros.

El alcalde, Xosé Manuel Fernández Abraldes, destacó que todos estos proyectos se pueden ejecutar gracias "a la buena gestión económica llevaba a cabo en el ejercicio de 2016", que hizo que se cerraran las cuentas con superávit, lo que permite invertir parte del mismo dentro de las limitaciones que impone el Gobierno estatal.

En cuanto a la mejora de equipamientos, se va a colocar carpintería exterior en los locales sociales de Agudelo y Cangrallo; la primera fase de rehabilitación de la antigua escuela de Barro, en cuya parcela también se hará un parque infantil, y la dotación de un aseo adaptado en el campo de fútbol de Outeiro. También se cerrará la parcela de la nave municipal.

Se mejorará la seguridad vial en carreteras de Valiñas, Perdecanai y acceso al polígono de Sequeiros, y el remate del pavimento en aceras de la calle de O Pazo. Se repondrá la iluminación pública en la calle Carrasqueira y se sustituirá la del polígono de Sequeiros por otras luminarias más eficientes.