Pontevedra y el área metropolitana de Thau, en Francia, estrecharon lazos ayer a través de una visita de una delegación de representantes de varios de los ayuntamientos de esta región de Occitania, que tiene más de 90.000 habitantes. El grupo contó con el mejor de los guías, el mismo alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, que, con la ayuda de una traductora de francés, les mostró los lugares más emblemáticos de la ciudad, tanto a nivel histórico y de riqueza patrimonial como por ser un claro ejemplo de un modelo de ciudad que ya ha sido premiado en varias ocasiones a nivel mundial.
François Commeinhes, senador alcalde de la ciudad de Sète y presidente de la Thau, encabezó la delegación por la parte francesa, que completaron varios cargos electos de varios de los ayuntamientos del área, especialmente los de materia económica. Reconoció que las similitudes entre Pontevedra y el área metropolitana a la que representa, ya que Sète es la ciudad más importante, son muy grandes. "Sète es la Pontevedra del Mediterráneo y Pontevedra es la Sète del Atlántico", comparó.
"Somos dos ciudades que tenemos puerto y tenemos problemas similares de circulación. Por las fotografías que nos enseñaron del antes y el después de Pontevedra, En Sète estamos teniendo esas mismas complicaciones que había aquí de bloqueo de circulación", subrayó el alcalde francés.
Este viaje servirá a los mandatarios de Thau para aprovechar la experiencia vivida en Pontevedra desde los primeros pasos para la peatonalización y humanización de los diferentes barrios de la ciudad.
El modelo pontevedrés llegó a oídos de estos ayuntamientos franceses tras un viaje que Christian Hernandez, mientro del Consejo de Desarrollo de Thay, realizó a Pontevedra en bicicleta. "Él se enamoró de la ciudad y nos lo transmitió. Desde entonces hemos tenido curiosidad por conocerla", explicó Commeinhes.
El alcalde de Sète reconoció que las problemáticas de las ciudades cambian en función de diferentes factores, como las condiciones meteorológicas: "aquí en Pontevedra el problema es la lluvia, pero en Thau lo es el calor". Por ello, consideró que cada uno debe adoptar las medidas adecuadas para afrontar para superar los inconvenientes que puedan frenar el normal funcionamiento de una población, "para regular tanto la circulación como los problemas de tráfico".
Apoyo de la población
La idea es poder peatonalizar ciertas zonas de Sète y no solo durante la celebración de determinados acontecimientos, culturales y deportivos.
Respecto al posible apoyo que la población de Sète y otros ayuntamientos de Thau a este tipo de iniciativas, Commeinhes recordó que "poco a poco la población se da cuenta de que las mejoras que se van implantando son beneficiosas para ellos". "Tenemos que ir trabajando para que las acepten también", concluyó.
