Vecinos de Cerdedo-Cotobade y de Campo Lameiro se quejan de la falta de actuación contra los nidos de la avispa asiática. Días pasados fueron picados varios trabajadores en el entorno de la iglesia de San Isidro, en Campo Lameiro, y ahora hay otro foco "enorme" en el lugar. Los vecinos afirman que el pasado viernes dieron aviso a Emerxencias quien les comunicó que había dado parte a Agro Galego, pero ayer todavía el nido seguía allí con el consiguiente peligro para los residentes.
Ramiro Aller, muy conocido en A Estrada por ser desde hace décadas el guarda de la Sociedade Deportiva Río Ulla, es uno de los vecinos de A Estrada que han decidido implicarse en la lucha contra la avispa asiática usando contra esta especie invasora los medios que tiene a su disposición. Consciente de los daños que causa a la fauna y a la flora autóctona, como tantos otros -entre los que figuran el apicultor cerdedense Carlos Blanco y a los que se acaba de sumar Irene Saa, la dueña de los cien enjambres de abejas aniquilados en Nigoi, tras constatar que ya le han aniquilado algunos de los que tiene en Arca- fabrica con sus propias manos ingeniosas trampas con botellas de plástico que están consiguiendo eliminar a un buen número de "velutinas": aproximadamente unas 70 u 80 por botella cada dos días. Es una lucha desigual que ya se está dando en Tabeirós-Montes pero que, de momento, va ganando la avispa asiática pese a la importante labor que están realizando para erradicarla efectivos de emergencia como Emerxencias de A Estrada, cuya labor exaltó ayer Irene Saa después de que en la noche del sábado sus efectivos acudiesen a Nigoi a envenenar dos nidos.
Eran solo dos de los múltiples existentes en toda la comarca de Tabeirós-Montes y, en general, en toda Galicia. Aun pendiente de que retiren el de Paramá que denunció recientemente, el presidente de la Asociación de Veciños de Paramá, José Manuel Baños, denuncia la existencia de otro en la misma parroquia de Santo André de Vea: uno radicado a 30 metros de altura en un eucalipto radicado en Calvelo. Ya le pasó aviso al 112 y urge a retirar ambos. También en Figueiroa de Abaixo el vecino Manuel Sangiao denuncia que hay un nido en pino de jardín próximo a una pista, cuya existencia denunció hace semanas sin que fuese retirado con el consiguiente riesgo para los viandantes. Igualmente, siguen esperando, según detalló Carlos Blanco, los dueños de una nave ganadera de Revolta (Cerdedo) que denunciaron hace 15 días la existencia de un gran nido en la edificación. Blanco agregó que fuentes municipales le respondieron que carecían de veneno para actuar y esta, apunta, fue la misma respuesta que obtuvieron los vecinos que denunciaron la existencia de dos grandes nidos en robles de Pedre. Ya en Campo Lameiro, al lado de la iglesia de San Isidro -donde un ataque de avispa asiática a madereros obligó a movilizar un helicóptero para asistir a los heridos- una vecina subrayó que siguen esperando que el 112 neutralice el nido que ocasionó el incidente.
Por su parte, Aller denuncia la existencia de grandes nidos en todas las parroquias de Vea y, en general, de A Estrada.
