Los comerciantes del casco viejo de Pontevedra demandan mayor cuidado y planes de rehabilitación para hacer un barrio "más habitable". Se trata, en boca del presidente del Centro Comercial Urbano Zona Monumental, Miguel Lago, de "la zona más emblemática y el mayor atractivo" de la ciudad, que ve languidecer su comercio por la pérdida de habitantes. Los excelentes resultados turísticos afectan solo" de forma secundaria" a los negocios que no son hoteles o restaurantes, explica, por lo que precisan otras medidas.

"Es muy extraño que un turista venga al mercado y compre un rodaballo; viene y le hace una foto", señala Miguel Lago para ilustrar la situación. Lago reconoce que las ventas aumentan porque los turistas pueden demandar estos productos a través de los restaurantes, pero el volumen de trabajo que les genera no es verdaderamente significativo.

El comercio de proximidad solo se puede mejorar a través de actuaciones en el casco histórico que logren paliar las incomodidades derivadas de vivir en este lugar. "Cuanta más gente lo habite, mejor funcionará el comercio", subraya Miguel Lago. "El problema que tiene la zona es que necesita una rehabilitación y la pérdida de habitantes. A pesar de ser un lujazo tener una casita en la zona monumental y pegada al centro de la ciudad, hay un problema de aparcamiento, no hay ascensores... Tiene esas dificultades".

Por eso considera fundamental adoptar medidas que mejoren la zona monumental para sus habitantes y también sus visitantes. "Independientemente del modelo urbano y de algunas decisiones acertadas, como acabar con los aparcamientos gratuitos que había, si no cuidamos la belleza de nuestro patrimonio histórico, no tendremos nada".

El presidente de los comerciantes llama a proteger la especificidad del casco histórico pontevedrés, uno de los pocos lugares donde las madres pueden dejar a sus hijos jugar sin tener que llevarlos de la mano, como ocurre en otros entornos urbanos. Precisamente advierte de que darle impulso para que sea una zona agradable y cómoda para vivir es la garantía para evitar que la zona monumental se transforme, como ha ocurrido en otras ciudades, en un lugar abandonado "o solo para turistas", casos de Barcelona o Santiago de Compostela.

Estado de las viviendas

El barrio monumental es "el futuro", sostiene Lago; pero en su presente hay algunas calles pendientes de una puesta a punto. En este sentido, los vecinos centran el foco sobre algunas vías con edificios en mal estado que empobrecen el aspecto general. Es el caso de calles como Tetuán, do Barón, Princesa, Isabel II o Ponte.

Una mejora en el estado de la zona monumental podría servir para recuperar a parte de la población que abandonó el casco histórico con la burbuja inmobiliaria, indica Lago.

El municipio de Pontevedra tiene en la actualidad un total de 711 inmuebles en mal estado. De ellos, 201 están declarados como ruinosos según los datos ofrecidos por el Instituto Galego de Estatística. Hay, además, otros 3.103 inmuebles declarados en estado deficiente, de acuerdo a los mismo datos, frente a los 38.754 que se encuentran en buen estado.

Si prestamos atención al año en que fueron construidas, casi 70 viviendas de antes del año 1900 están en estado ruinoso en la localidad. A las que podemos sumar otras 173 que se consideran en mal estado. Otros 147 edificios destinados a otros usos, de diferentes años de construcción, se hallan también en estado ruinoso.