El gobierno tripartito de Ponte Caldelas hace balance de estos dos años y afirma que el municipio "ha mejorado mucho". Para explicar su gestión ha publicado un boletín informativo de 16 páginas. El alcalde, Andrés Díaz, afirma que "non hai nada que celebrar porque queda moito traballo por diante, pero si hai moito do que informar, como corresponde a un goberno progresista e que aspira a ser un modelo de transparencia e de relación directa coa xente".

El documento se abre con una imagen del grupo de gobierno al completo bajo el título "Traballando coas portas abertas e as contas saneadas" y se centra en la "seriedade da política económica, reducindo a débeda herdada de 1 millón de euros a pouco máis de 500.000 euros, na imaxinación á hora de abordar os retos, o diálogo e a sensibilidade social".

La ligera recuperación de población experimentada el año pasado, después de más de una década de caída constante, que llevó a Ponte Caldelas a pasar de 7.000 a 5.500 habitantes, constituye otro de los puntos abordados. También se habla de las políticas de empleo derivadas de los acuerdos con las empresas del polígono de A Reigosa, que han supuesto la creación de un centenar de puestos de trabajo, ocupados fundamentalmente por mujeres del municipio.

El tripartito destaca la reducción en la fiscalidad municipal, que se manifiesta en las bajadas en los recibos del agua para todo el vecindario y bonificaciones adicionales para familias numerosas o personas en riesgo de exclusión. También en el recibo de circulación de vehículos y en las tasas por uso de instalaciones deportivas y por visitas guiadas al área arqueológica de Tourón.

En cuanto al apartado de la dinamización social y cultural del municipio, que va desde el "Entroido do Verán" a la llegada del campus de fútbol Alcántara, pasando por las degustaciones de la Festa da Troita por todas las parroquias. Sin olvidar la Festa Gastronómica da Emigración, la Subida a Ponte Caldelas del campeonato gallego de Rally de Montaña o los concursos de tapas. Todo ello, dice Díaz, "converteu xa a Ponte Caldelas nunha referencia e nun incremento na atracción de visitantes".

Un apartado específico se detiene en la lucha para lograr las obras de la carretera autonómica PO-234, en la que se sitúan las peligrosas curvas de Laxoso. El Concello recuerda el trabajo conjunto con la Plataforma Veciñal de Ponte Caldelas y Cotobade y las dos manifestaciones populares que obligaron a la Xunta "a dar o brazo a torcer". Incluye una nota de prensa oficial de la Xunta de 2011, en la que ya se prometían las obras de forma inminente, incluidas las expropiaciones. El actual gobierno caldelán explica que "agora mesmo foi necesario tomar a iniciativa para propoñer a sinatura dun convenio, pioneiro en toda España, polo que o Concello comprometeuse a pagar as expropiacións como fórmula para acabar coas escusas da Xunta".

"Soluciones imaginativas"

El Concello explica en este folleto las "solucións imaxinativas" que tuvo que poner sobre la mesa para defender Ponte Caldelas. Así, además de la PO-234, recoge el alquiler simbólico a la registradora de la propiedad de las antiguas oficinas de Turismo, como fórmula para evitar la pérdida de este servicio "poos recortes do Goberno de Rajoy". Pero aborda también el expediente urbanístico abierto a las empresas del tanatorio para que arreglaran el edificio, obligándoles a invertir 127.000 euros y a la inminente reapertura. Finalmente, mantiene sobre la mesa la propuesta de convenio con la Consellería de Educación para dotar de comedor al colegio de A Reigosa.

Según el grupo de gobierno "a defensa constante dos intereses de Ponte Caldelas caracterizou estes dous intensos anos. Quedou patente coas tres protestas realizadas pola negativa da Xunta a abrir a Casa da Quintán, completamente restaurada cun gasto público de 500.000 euros, como centro social. A reivindicación de axudas para o mantemento e promoción da área arqueolóxica de Tourón; e a esixencia do desbloqueo urbanístico á Central de Transportes da Reigosa, que está a impedir a concesión de licenzas".