La bandera azul ya no lucirá más este verano en Ponte Caldelas. Tras meditarlo mucho, el Concello decidió arriar ayer el distintivo de la playa fluvial de Calzada para el resto de la temporada de baño. Lo hizo al haber agotado todo el mes de julio y buena parte del de agosto sin haber conseguido la dotación reglamentaria de tres socorristas en el arenal.

Las normas de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC) obligan a disponer de esos tres socorristas y a mantener dos en servicio de manera permanente. Sin embargo, las dificultades surgidas este año en el proceso de selección y contratación fueron "insuperables", según destacó ayer el Concello, ya que hubo imprevistos como la renuncia de unos de los seleccionados o la marcha de uno de los que estaban en prácticos al ser contratado para otro trabajo.

Ante esta tesitura, el Concello prefirió "ser transparente" con ADEAC, la encargada de suministrar los emblemas, para ofrecer una imagen de seriedad y evitar comprometer la concesión de este distintivo en el futuro.

Pese a la renuncia al no cumplir con la normativa en los plazos establecidos, el equipo de gobierno finalmente sí encontró un tercer socorrista. Para ello hicieron falta seis ampliaciones de la primera oferta de empleo público que se lanzó en junio. "Fue necesario contactar personalmente con él, ya que el Servizo Público de Emprego carecía de inscritos", explicó el Consistorio.

De este modo, el tercer socorrista se incorporará hoy y Ponte Caldelas completará la dotación requerida en la playa hasta el final del mes de agosto, con el objetivo de "garantizar la seguridad al 100%, con independencia de que ondee o no la bandera azul".

El regidor, Andrés Díaz, destacó ayer que fue una decisión "dolorosa pero responsable". Díaz aseguró que era necesario actuar con rigor en las relaciones con ADEAC. Además, añadió que los problemas de contratación de socorristas son habituales y afectan a muchos concellos.