Pontevedra y Vilaboa son "ejemplos a seguir" en la instalación del tratamiento de residuos orgánicos a través de la fórmula de compostaje que la Diputación provincial comenzó a promover hace dos años con el objetivo de cumplir las normativas estatales y europeas sobre reciclaje. Así lo aseguró ayer el vicepresidente de la institución, César Mosquera, para quien ambos municipios son "los más avanzados" no solo de la provincia, sino "de Galicia".

Ambos concellos encabezan un grupo de otras cuatro localidades que Mosquera también destacó como aquellas que "entrarán de cabeza en el compostaje antes de finales de 2018". Son Mondariz, Mondariz-Balneario, As Neves y O Grove.

"Están en la segunda fase del Plan Revitaliza, pero ya con un planning y habiendo pedido a la Diputación de Pontevedra dinero para invertir en logística", expuso el vicepresidente, que destacó que todos ellos están pendientes de "publicar una licitación propia".

El plan de la institución provincial pasa por una idea clave: que antes de 2019 desaparezcan en estos ayuntamientos la recogida de basura universal, es decir, el contenedor verde. "Se eliminarán obligatoriamente los colectores de la llamada fracción resto, en los que se puede echar todo tipo de deshechos con fecha límite de diciembre de 2018", profundizó Mosquera.

De este modo, en ese momento, deberá haber una división de la basura diferenciada en recipientes entre orgánicos, que se ubicarían en los composteros, metales, plásticos y envases, papel y vidrio.

"Dar el paso de forma radical y audaz será la clave y determinará que este nuevo sistema de tratamiento de basuras funcione económicamente", explicó el asesor técnico de la Diputación en materia de compostaje, Carlos Pérez. "Estudiamos muchas fórmulas y creemos que esta es la más barata", destacó Mosquera.

A día de hoy, en Vilaboa están instalados ya 36 módulos con diferentes ubicaciones e incluso hay dos restaurantes y un geriátrico que se erigen como "grandes productores singulares". Por su parte, en Pontevedra el número de puntos de compostaje es superior al del concello vecino, pero menor en cuanto a proporción sobre la población total.

En el caso de Pontevedra y O Grove, la entrada en el compostaje irá "por fases", al tener en cuenta su "complejidad". En los cuatro restantes, se hará "de golpe".