La jornada sobre "Montes vecinales: gobernanza, cambio climático e incendios forestales", organizada por el colectivo Iniciativa Comunales en colaboración con la Mancomunidade de Montes de Pontevedra, reunión ayer en la Casa de Montes de Marcón a representantes de comunidades de montes, profesionales del ámbito forestal e investigadores.

Estos expertos en monte vecinal vaticinaron un "dramático" panorama para el monte gallego. Temperaturas medias y altas más elevadas, disminución de las precipitaciones y de los días de lluvia de una forma más acusada a partir de 2060, una vegetación más estresada con menor humedad provocarán en el futuro incendios más grandes, rápidos e intensos, difíciles de apagar, con mayor impacto en el suelo afectado y que supongan una mayor amenaza para las zonas habitadas.

Los expertos trataron de analizar "de qué forma afecta el cambio climático y qué estrategias tomar para intentar combatir esos efectos", indicó el presidente de Iniciativa Comunales, Carlos Morgade. "Lo que sucedió en Portugal -señaló Morgade en alusión al devastador incendio en Pedrógão Grande donde 64 personas perdieron la vida y más de 250 resultaron heridas- es la constatación de lo que venían avisando los técnicos".

En este sentido, apuntó que las condiciones ambientales extremas serán "cada vez menos raras y pueden complicar mucho las condiciones para apagar incendios, poniendo el peligro la vida de las personas".

El científico José Antonio Vega Hidalgo, vinculado a la Sociedad Española de Ciencias Ambientales y al Centro de Investigación Forestal de Lourizán, señaló que si bien en los últimos cinco o seis años se ha reducido el número de incendios, "no parece fácil" que se vaya a lograr este objetivo. Para ello, ha destacado la necesidad de apostar por la educación, el aumento de la vigilancia y especialmente el rechazo social como "herramienta básica" para actuar en este sentido. A estas propuestas añadió el asociacionismo entre comunidades y la implicación de los comuneros en la defensa del patrimonio.