Circular por la acera de la avenida de Compostela más próxima al estadio de Pasarón es prácticamente imposible. La maleza que crece en unas parcelas privadas colindantes se ha hecho dueña por completo de un espacio destinado a los peatones, hasta el punto de que transitar por esa zona se convierte en una carrera de obstáculos para esquivar las zarzas y las señales, lo que obliga e algunos casos a bajar a la calzada, con se consiguiente peligro que eso supone ya que en esa zona los coches circulan a velocidad elevada.
Las quejas vecinales se han sucedido en los últimos días en esta zona y se suman a las que se registran en otros barrios de la ciudad por el mismo motivo. Hay calles y caminos próximos al casco urbano donde la vegetación dificulta no solo el paso de los peatones sino también de los coches.
Este tipo de quejas se han repetido en las últimas semanas en Monte Porreiro o en el entorno de Campolongo, en especial en la rúa das Estrigueiras, donde hay puntos en los que el vial se estrecha en exceso por la abundancia de maleza.
El malestar vecinal por esta razón también es palpable en el rural pese a que el Concello anunció hace unas semanas una campaña general de desbroces.
