El Partido Popular de Poio solicitará un pleno extraordinario para debatir la reducción del IBI y la aplicación de bonificaciones fiscales en construcciones rurales. El grupo de la oposición entiende que esta es la única forma de "compensar la economía de las familias, que sufrirán un gran plano " con la regularización catastral "por culpa de la parálisis del Concello en los últimos cuatro años".

El portavoz del grupo popular municipal, Ángel Moldes, anunció esta decisión durante la asamblea que su partido organizó en la mañana de ayer en el local de la Comunidad de Montes de San Xoán, en A Seca, para explicar a los vecinos la razón de las tasas que tienen que pagar ante el requerimiento de Hacienda.

Moldes informó a los vecinos que el PP ya ha pedido a los técnicos municipales un informe sobre el número de vecinos afectados y las cantidades que ingresará el Concello tras la regularización catastral que ejecuta el Estado. El objetivo es estudiar esta información y establecer un cálculo para conocer hasta cuánto se podrían reducir tanto el impuesto general del IBI como aumentar las bonificaciones fiscales sobre las construcciones rústicas.

A día de hoy, el Impuesto sobre Bienes e Inmuebles está en un 0,47, pero la ley permite rebajarlo hasta un mínimo de 0,40. Mientras, la legislación permite aplicar bonificaciones rurales de hasta el 95%, "pese a que Poio no lo hace", destacó Moldes.

Durante la asamblea vecinal, se comentó el recibo de 60 euros que algunos propietarios ya han tenido que pagar a Hacienda corresponde a la tasa de regularización de sus inmuebles en el catastro. Sin embargo, Moldes explicó que "esto es solo el primer paso y lo peor está por llegar", ya que el Concello "pasará a cobrar en el próximo ejercicio el IBI calculado sobre los nuevos valores catastrales y los atrasos de este impuesto de hasta cuatro años anteriores".

"Cientos de miles"

El PP considera que estos nuevos valores permitirán al Concello ingresar , "por lo bajo, cientos de miles de euros". El líder del Partido Popular en Poio aseguró que "el Consistorio es de lejos la administración que más ingresará después de la regularización y, lo que es peor, podría haber evitado que los vecinos tuviesen que pagar las tasas y los atrasos".

Moldes recordó el ejemplo de A Estrada, donde el regidor informó a los vecinos en cuanto tuvo conocimiento de la regularización para que iniciasen un proceso voluntario de regularización "antes de que comenzase el de oficio". "Mientras, el bipartito tuvo cuatro años para actuar pero evitó dar la cara hasta el último momento".