La Diputación trabaja en la elaboración de un nuevo Plan de Autoprotección para el centro Príncipe Felipe, un programa cuyo objetivo es "prevenir y controlar los riesgos sobre los usuarios y bienes del centro en situaciones de emergencia", señalan los portavoces de la institución provincial.

La diputada Eva Vilaverde indicó que este documento es obligatorio para cualquier establecimiento de uso residencial público, si bien los anteriores gobiernos provinciales nunca llegaron a aplicarlo.

En general las mismas fuentes explican que se busca "prevenir y controlar los peligros que puedan sufrir cualquiera de los trabajadores y menores que diariamente se encuentran en el centro". Añaden que en el nuevo documento se definirá el protocolo de actuación ante una situación de emergencia, se analizarán las posibles situaciones que puedan desencadenar esos escenarios (incendios, catástrofes naturales...) y se definirán las acciones que se deben planificar cuando se desencadena".

La dirección de Príncipe Felipe estima que el Plan de Autoprotección afectará a unas 1.340 personas tanto en los centros de acogida como en la Escuela Infantil, el colegio de Primaria, el CIFP Carlos Oroza, el IES Montecelo y el centro de Educación Especial.

El Plan está en fase de contratación y se presentaron a la licitación 9 empresas interesas, que están siendo evaluados por los servicios técnicos de la Diputación. El presupuesto municipal reserva, a sugerencia de los técnicos, 33.000 euros para elaborar el programa, que aumentará la seguridad del centro y que se prevé que esté listo en el plazo de unos cuatro meses. Posteriormente deberá presentarse en el registro de la Consellería de Presidencia y se espera que si se cumplan las previsiones pueda empezar a aplicarse a principios del próximo año 2018.