Reconquistar concellos y volver al gobierno de la Diputación es el principal objetivo del PP ante las elecciones municipales de 2019, un horizonte al que señalaron ayer el presidente provincial de los populares en Pontevedra y vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y también los nuevos diputados que se incorporan a la Diputación.

Rueda encabezó la presentación de los próximos representantes de su partido y recordó que se trata de "cambios pactados" desde 2015. Son relevos que afectarán a los partidos judiciales de Tui, Ponteareas y Pontevedra y que supondrán la salida de cuatro diputados que han ejercido durante los pasados dos años.

Por el partido judicial de Ponteareas el relevo se hace entre el ex alcalde de Mondariz, Julio Alén, y la concejala de Ponteareas Belén Villar; por el de Pontevedra deja el escaño la alcaldesa de Moraña, Luisa Piñeiro, para cedérselo al regidor de A Lama, Jorge Canda, y dentro de ese mismo partido judicial por la comarca de O Morrazo se va el ex primer edil de Cangas, José Enrique Sotelo, y se incorpora el portavoz del PP de Moaña, José Fervenza.

Finalmente, por el partido judicial de Tui cede su escaño la actual portavoz del PP en la Diputación y alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, cuyo puesto pasa a ocupar el portavoz del PP en Salceda de Caselas, Santiago Rodríguez Davila.

A mayores, explicó Alfonso Rueda, estaban pactados dos cambios más que finalmente no se realizaron. Uno era en el partido judicial de Pontevedra entre el portavoz del PP en la Diputación y del PP de Poio, Ángel Moldes, y el portavoz del los populares en Pontevedra, Jacobo Moreira, que no pudo realizarse tras la designación del capitalino como diputado autonómico. El otro relevo le habrá afectado al partido judicial de Vigo y sería entre Jesús Vázquez Almuiña y el alcalde de Redondela, Javier Bas, pero ya se ejecutó en 2015 al haber sido nombrado el ex alcalde de Baiona conselleiro de Sanidade.

Los diputados tomarán posesión el próximo septiembre, muy posiblemente en el segundo pleno del mes.

Alfonso Rueda agradeció el papel de los representantes políticos salientes y su trabajo de "oposición leal, constructiva y a base de saber cómo funciona la Diputación,". Sabiendo que ocuparían sus cargos durante dos años, señaló, "trabajaron de modo ejemplar" asumiendo el nuevo rol de los populares como oposición al gobierno provincial, un papel "al que se supieron adaptar".

En especial, quiso agradecer la labor de Nidia Arévalo que "tuvo que aguantar muchos desplantes y malas caras, especialmente de la presidenta" y en general de los diputados del PP, que "supieron aguantar los malos modos".

Afirmó el presidente provincial de los populares que los cuatro diputados salientes "han dejado el listón muy alto", un nivel que "vamos a pedir que mantengan" sus sucesores en lo escaños provinciales. Representan, añadió, al grupo mayoritario en la Diputación "y de ese trabajo incansable va a venir el próximo camino, que es en las municipales reconquistar muchos concellos y volver al gobierno" de la institución.

Tanto Alfonso Rueda como Nidia Arévalo hicieron referencia a la "normalidad" con la que se realiza el relevo "a diferencia de otros partidos personalistas donde esto no sería posible". Visibilizando esta cotidianidad, el presidente provincial compareció con todos los diputados salientes y entrantes, si bien Enrique Sotelo se incorporó más tarde a la reunión y no figuró en la foto "de familia" inicial.

Arévalo afirmó que se va "con la sensación de cuanto se hizo en esta provincia hasta hace 2 años y que poco se hizo en estos dos años" , un periodo que en su opinión se define por la parálisis de la institución "y no podemos permitir que esto continúe".

Por su parte, uno de los diputados entrantes, Jorge Canda, incidió en que "tenemos trabajo" para recuperar en los próximos dos años "lo que queremos todos, la Diputación, y también los concellos en los que hemos perdido por poco margen de votos".