- ¿Por qué eligió Pontevedra para vivir?

- Bueno, porque aquí trabajo, tengo mi familia, pero también porque me gusta. El tamaño de la ciudad es ideal. Es un lugar tranquilo, cómodo, tiene muchísimas prestaciones y para vivir en familia y criar a los niños es perfecto. Te da mucha libertad y mucha seguridad. Todos podemos andar por la calle sin miedo.

- ¿Y para trabajar cómo te resulta?

- Cómoda. En una ciudad más grande tendría más opciones, pero dado que elegí vivir aquí hace muchísimo tiempo no voy a cambiar a estas alturas.

- ¿Cómo ve a Pontevedra una agente de viajes?

- Si la veo con ojos de turista me parece una ciudad fantástica. Tiene una amplia oferta cultural, tiene un casco histórico que es impresionante, cuenta con un museo que alberga una colección interesantísima. Es muy cómoda para visitarla, para caminarla. El problema puede aparecer cuando vienes a comprar. Acceder con el coche supone una dificultad. Siempre hay un "pro y un contra" en cada decisión.

- ¿Entiende que el modelo urbano es una barrera para fomentar visitas?

- No, para nada. Es una dificultad que no puedan circular bien los coches y pienso que se debería hacer algo más en ese sentido. Sin embargo, entiendo que desde que se han hecho las mejoras se ha beneficiado el turismo. Y esto repercute en la economía local, en hotelería, hostelería y en las tiendas.

- ¿Cómo vendería Pontevedra? ¿Se puede imaginar un anuncio?

- "Vista Pontevedra y te sentirás como en casa". La comodidad y la tranquilidad es un punto a favor importante.

- ¿Qué le propondría a un turista que quiere visitarla?

- En principio diría que cualquier hotel de la ciudad vale. Aquí todo queda cerca. Y luego que caminen, que descubran, que visiten el museo, que es un tesoro, y después que aprovechen bien nuestra hostelería. Porque otra cosa no sé, pero aquí comer comemos muy bien.