El empleado de una gasolinera de Vilagarcía de Arousa ha aceptado una condena de 9 meses de prisión al reconocer ante el tribunal ser el autor de un delito continuado de estafa y apropiación indebida. La Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra ha resuelto el caso mediante un acuerdo de conformidad entre la Fiscalía y el acusado. El empleado, según consta en la acusación de la Fiscalía, se quedó con 16.900 euros tras alterar los libros registro del establecimiento.