Tras numerosas quejas hechas públicas y trasladadas a diferentes instituciones, el sindicato Comisiones Obreras acusó ayer a la Diputación provincial de haber presentado a la Xunta de Galicia una propuesta sobre el convenio que ambas tienen relativo a la ciudad infantil Príncipe Felipe con vistas a forzar su transferencia al gobierno autonómico. Según José Ramón Piñeiro, secretario general de la Unión Comarcal de CCOO de Pontevedra, el organismo provincial dejaría de prestar el régimen de internamiento para los jóvenes conflictivos desviados por la Consellería de Política Social. Asimismo, asegura el sindicato, el centro dejaría de ofertar el servicio de UPA (Unidade de Primeira Acollida).

"No nos deja de sorprender la actuación de la Diputación por su sorprendente falta de sensibilidad", dijo Piñeiro, que recordó que las quejas del sindicato habían sido trasladadas con anterioridad al Fiscal Jefe, al de Menores , a la delegación territorial de la Xunta y a la propia Consellería. "Menos a la Diputación, que se negó a recibirnos", puntualizó.

En su opinión, esta nueva propuesta evidencia las ansias de que se materialice la transferencia de competencias de la ciudad infantil a la Xunta de Galicia. Por ello, acusa al gobierno de Carmela Silva de realizar una "utilización partidista". En caso de que esto ocurriese, alertan los sindicalistas, peligraría medio centenar de puestos de trabajo de personal no fijo. Actualmente, la plantilla total de funcionarios del centro es de 207, incluidos 88 educadores.

Reserva de 100 plazas

El convenio en vigor actualmente, que finalizará en unos días, incluye una reserva de 100 plazas para menores conflictivos desviados por la Xunta. 65 de ellas son para internamiento, aunque solo hay ocupadas 41; 30 son para el centro de día, pese a que se está dando uso a 20. El resto son 10 de la UPA. CCOO indica que la propuesta presentada por la Diputación supondría la pérdida de 75 plazas, las de la Unidade de Primeira Acollida y las de internamiento.

"De esta manera, solo quedarían 26 menores internos que son propios de la Diputación repartidos en los tres centros", puntualizó José Ramón Piñeiro.

Tal y como informó CCOO, Diputación y Xunta mantuvieron ayer un encuentro en el que abordaron la posible renovación del convenio, que ya el pasado diciembre fue ampliado hasta julio de 2017.

Por su parte, José Luis García Pedrosa criticó la política puesta en marcha por la Diputación. "Los de izquierdas, cuando gobiernan, lo hacen como partidos de derechas y restan de recursos básicos esenciales", resumió.