El vicepresidente de la Diputación, César Mosquera, aseguró ayer que el proceso mediante el cual se decició construir "lombos" en la parroquia de Verducido contó con el beneplácito del Concello de Pontevedra.

"Los técnicos del Concello hicieron una propuesta para todas las parroquias en base a criterios técnicos y se supervisaron y se actuó", explicó ante la críticas de un frente vecinal.

En este sentido, recordó que habían sido los propios vecinos los que habían pedido estos mecanismos que obligan a reducir la velocidad al tráfico rodado.

"No nos gustaría que estén detrás los que hacía carreras ilegales, como pasaba en O Campiño", consideró el nacionalista, que también rechazó motivos de tipo político para la crítica.