El Concello adjudicó ayer la ejecución de 43 nuevos "lombos" en Salcedo, por un importe de 122.000 euros (algo más de 2.800 euros cada uno) y se convertirá dentro de unos cuatro meses -plazo de ejecución previsto- en la primera parroquia con una red integral de estos elementos de calmado del tráfico.

La intención del gobierno local es extender este modelo a la totalidad del rural, de modo que los 353 "lombos" censados en noviembre pasado serán más del doble al final de la campaña. De hecho, en su día se apuntó que detrás de Salcedo llegarán planes similares en Campañó, Santa María de Xeve y Mourente, para su extensión paulatina al resto de parroquias en función de las necesidades de cada red viaria.

El concejal Demetrio Gómez explicó que se enmarca dentro de la intención del gobierno local de "trasladar las medidas de seguridad de tráfico de las vías municipales urbanas al ámbito rural fijando las prioridades de movilidad que hay en la ciudad: primero el peatón, segundo las bicicletas, y tercero el transporte motorizado".

Añadió que se actuará especialmente, en "aquellas zonas más pobladas, siguiendo las peticiones del consello parroquial así como las recomendaciones técnicas municipales". El concejal delegado de la parroquia recordó que en la zona urbana es "fácil diferenciar entre calles y carreteras, pero no tanto en la zona rural" por lo que uno de los objetivos de este plan es "dejar clara las preferencias de movilidad en las parroquias".