El paseo peatonal diseñado por Costas tiene el objetivo de dar continuidad al ya existente, ejecutado hace siete años por el Concello, hasta el nudo de Placeres. Se trata de un plan de 2,6 millones de euros que establece tres fases de actuación. La primera comprende el tramo ahora paralizado por Fomento, desde la rotonda de Malvar hasta el arranque de los carriles que acceder al nudo elevado de Mollabao. En ese recorrido un carril será ocupado por el paseo, ya que es imposible crear una pasarela sobre el agua puesto que afectaría al canal de navegación. A continuación, el recorrido peatonal y ciclista discurriría por los terrenos sobrantes y sin uso al borde del mar, producto de las obras de remodelación del enlace con la PO-11 en Mollabao. Ya a la altura de la fábrica de Ence será necesario instalar una pasarela volada sobre el agua, similar a la ya existente en Placeres, para dar servicio a las mariscadoras. Se plantea un paso de apenas 2,5 metros de ancho en ese recorrido de al menos 700 metros, una anchura muy escasa para permitir el tránsito conjunto de peatones y bicicletas, como ya han alertado colectivos como Pedaladas. Además, una vez concluida la pasarela de las mariscadoras no se ofrece una salida natural ya que queda excluida de este proyecto la conexión por el barrio de O Cabo. La previsión era ejecutar las obras en 2018, pero con estas últimas trabas, el calendario queda en entredicho.