El Concello no promocionará a la ciudad de Pontevedra como destino internacional de peregrinación mariana. La propuesta del PP de convertir el Santuario de las Apariciones, donde vivió Sor Lucía durante 25 años en un foco internacional de turismo religioso topó ayer con el rechazo de la mayor parte de los grupos municipales e incluso María Rey (Ciudadanos), que sí apoyó el fondo de la idea, no dejó de criticarla en sus formas por "el afán evangelizador" que rezuma y por ser "pretencioso" pretender convertir Pontevedra en un lugar similar a Lourdes (Francia) o Fátima (Portugal).

El concejal del PP Rafael Domínguez fue el encargado de defender una idea que, según recalcó, "es de índole económico, no religioso", pese a que basaba todo su argumento en la creencia católica de que la Virgen y el Niño Jesús se le aparecieron a Sor Lucía (una de las pastorcillas de Fátima) en Pontevedra. A su juicio el Concello, junto con la Diputación y la Xunta, deberían aprovechar esas apariciones (datadas entre 1925 y 1930, tras las de Fátima de 1917) para atraer hasta la ciudad a "gran número de turistas", asociado además al Camiño Portugués a Santiago.

Todos los demás grupos cuestionaron la idea al entender que este tipo de promociones corresponde directamente a la Iglesia Católica. Incluso desde Ciudadanos, pese a su voto favorable, Rey recordó que el "Santuario de las Apariciones -en la calle Sor Lucía- es lo que es", una pequeña sede religiosa nada que ver con las grandes explanadas y basílicas de Fátima o Lourdes, "lugares con los que no se puede comparar". Pese a que comparte que sea la Iglesia "la primera que debe trabajar para divulgar esos puntos de interés de peregrinación", votó con el PP "porque apoyamos cualquier propuesta económica".

Más críticos, con un rechazo de plano a la iniciativa, se mostraron BNG, PSOE y Marea. La concejala de Promoción da Cidade, Anabel Gulías dejó claro que el Concello "aprovecha cualquier propuesta para atraer gente, con el único requisito de que sea mínimamente seria". Señaló que la del PP "ofrece muy pocos argumentos más allá de unas referencias católicas, sin datos económicos de peso" y alertó de que este tipo de turismo "se limita a una serie de autobuses que entran y salen sin dejar ni un euro en la ciudad".

La "penitencia" del PSOE

Por su parte, Iván Puentes, concejal del PSOE (cuya intervención fue calificada por él mismo como una "penitencia que me impone el portavoz"), calificó de "exagerado colocar a Pontevedra a la altura de dos destinos marianos como Lourdes y Fátima" como sí asegura Rafael Domínguez- porque "nunca vi las mareas de gente por la Rúa Real y el casco viejo camino del Santuario de la calle Sor Lucía". Insistió en que "no existe ese potencial mariano del que habla el PP como para venderlo como referente turístico" y en todo caso "esa misión no corresponde a un ayuntamiento. Es la iglesia la que debe promocionar" estas creencias, como así hizo, según apuntó, en Portugal o Francia.

El más virulento con la idea fue Luís Rei, de Marea, que calificó las apariciones de las que habla el PP de "suposiciones nacidas de una fe religiosa". Por ello, la formación rupturista insistió en que "no procede aquí invocar esas suposiciones, no hechos concretos, como referencia para adoptar un acuerdo plenario".