Un vecino de Campelo (Poio) es objeto de investigación por parte de la Policía Local del municipio acusado de conducir de forma temeraria, hacer trompos y derrapajes peligrosos y huir de los agentes, todo ello a los mandos de un BMW que carece de ITV y presenta numerosas deficiencias que hacen que el vehículo no sea apto para circular.

Después de varias semanas de investigación y diversos incidentes, la Policía Local logró localizar al conductor después de su último periplo temerario, cuando realizaba maniobras peligrosas en la explanada de A Reiboa y acabó colisionando contra el portalón de una fábrica de conservas de la zona.

Todo comenzó hace dos meses, el 18 de marzo, cuando los agentes fueron alertados por teléfono de que a las 13,30 horas un BMW rojo realizaba trompos y arrancadas en la rotonda próxima al cementerio de San Xoán de Poio. La Policía Local dio el alto al conductor y pudo comprobar el deplorable estado del coche: tenía la ITV caducada, los focos delanteros estaban rotos, presentaba partes cortantes que pueden causar lesiones, neumáticos totalmente gastados y las defensas sujetas con cinta americana.

Por todo ello se decretó la inmovilización del vehículo, pero el conductor arrancó y huyó a toda velocidad, sin que fuera alcanzado por los policías que, en todo caso, contaban con su carné de conducir. Se verificó que era un vecino de Campelo, al que se le acusó de un presunto delito de desobediencia grave.

Pero no pudo ser localizado hasta mucho después. El 13 de mayo se recibió la alerta de maniobras peligrosas nocturnas en la explanada de A Reiboa, esta vez a cargo de un BMW rojo y otro azul. Tres días después el primer coche es interceptado en Campelo y se comprueba que está implicado en los daños en la fábrica de conservas, por lo que es trasladado al depósito municipal.

Fue entonces cuando se vio que las deficiencias aún eran de mayor calado, con ruedas delanteras incompatibles con las originales, las traseras de diferente tamaño, y con los alambres al aire, lo que afecta a la estabilidad del automóvil y suponen un "grave peligro para la seguridad vial", según la Policía Local.

Tras localizarse finalmente al conductor, se han formulado contra él varias denuncias administrativas.