La Audiencia de Pontevedra reserva cinco días para la celebración de un macrojuicio por narcotráfico contra catorce acusados de formar una red a la que se vincula con el alijo de 3.500 kilos de cocaína que transportó una lancha planeadora que apareció varada y quemada en la playa de A Lanzada en agosto de 2008. Al frente de la organización el fiscal sitúa a Rafael Bugallo Piñeiro, alias O Mulo, detenido de nuevo el día de Reyes en 2015 por su vinculación con otro alijo de 1.200 kilos de cocaína.

La Fiscalía pide penas para cada uno de ellos de entre 17 y 15 años de cárcel, que en total suman los 214 años, y fija la responsabilidad civil en 22,9 millones de euros.

A todos les atribuye un delito contra la salud pública referido a sustancias que causan grave daño a la salud, en cantidad de extrema gravedad, cometido mediante la utilización de buque y en el seno de una organización delictiva dedicada al narcotráfico, así como un delito de pertenencia a organización criminal.

Las penas más altas que se solicitan corresponden a quien es considerado líder de la trama, Rafael B.P., alias "Mulo", y para José C.F.B. por su reincidencia, al haber sido condenado previamente a nueve años también por narcotráfico.

Los procesados son vecinos de la comarca del Salnés y también ciudadanos colombianos.

La Policía Nacional y la Agencia Tributaria desarrollaron una operación en agosto de 2008 en la que fueron aprehendidas 3,5 toneladas de cocaína que transportaba una planeadora, que la organización dejó varada y quemó en la playa de A Lanzada al saberse perseguida por las fuerzas de seguridad. Fondeados en la ría localizaron después los cerca de 3.500 kilos de cocaína que fueron recuperados. La negativa del patrón de un pesquero que iba a suministrar combustible a la planeadora retrasó la descarga hasta que lograron la colaboración del patrón de otro buque, el Ratonero, implicado en otras operaciones de narcotráfico.