Los cuerpos de seguridad que han coordinado el dispositivo que impidió la entrada de 60 kilos de cocaína por el puerto de Marín, a bordo del buque Cap Beatrice, mantienen abierta la operación y no se descarta la posibilidad de que se practiquen más detenciones. Entre los dos primeros detenidos en esta intervención se encuentra un vecino de Sanxenxo, que acudió a recoger en medio de la ría la droga que transportaba a bordo de este buque un polizón de nacionalidad colombiana.

Tras su detención, en las últimas horas la Policía ha procedido a registrar los inmuebles vinculados de alguna forma con este vecino de Sanxenxo, a la búsqueda de más datos sobre la recepción de este envío, cualquier otro anterior y sus cómplices en esta actividad.

Al margen de que la investigación sigue abierta y que no se descarta que haya más detenidos, los cuerpos de seguridad que han participando en este operativo guardan un total hermetismo sobre el avance del mismo.

Mientras, la pequeña embarcación con la que el vecino de Sanxenxo acudió a recoger el fardo de cocaína -y que fue interceptada tras una persecución por la ría- permanece amarrada en el puerto de la Escuela Naval Militar, mientras que el buque Cap Beatrice, cuya actividad y tripulación es totalmente ajena a esta actividad ilegal, continuaba ayer sus tareas de carga y descarga, antes de proseguir su ruta hacia el puerto de Amberes.