El general Antonio Romero Losada está ya al mando de la Brigada Galicia VII. El nuevo jefe de la Brilat se puso al frente de esta unidad tras tomar posesión en un acto militar celebrado en la base General Morillo de Figueirido en el que recibió el guión de la Brilat de manos del máximo responsable interino de la Brigada tras el cese del general Cebrián Carbonell, el jefe del Regimiento Príncipe, el coronel Raimundo Rodríguez Roca.

En un acto presidido por el General de División Miguel José Martín Bernardi, jefe de la División Castillejos en la que se encuadra la Brilat, el nuevo mando de la unidad con sede en Figueirido manifestó su intención que mantener los estrechos vínculos que tiene Brigada Galicia VII con Pontevedra y con toda la comunidad autónoma.

Señaló como principal objetivo al frente de la unidad "la operatividad" la operatividad de la Brigada, es decir, que esta unidad esté siempre, como lo está, a la vanguardia de las Unidades Operativas del Ejército. No obstante, indicó que "dentro de eso, otro de mis objetivos será también que la Brigada esté siempre integrada en la población y en la región en la que está ubicada". El general dijo que "es muy significativo" que la unidad lleve el nombre de Galicia, algo que quiere decir que "está muy arraigada en esta tierra" y que "eso es algo que también quiero que forme parte de mi forma de mandar esta Brigada".

Tras mostrar su "satisfacción" y el "honor" que supone dirigir una unidad como la Brilat, Romero Losada quiso dejar constancia de la "magnífica labor" desarrollada por el general Cebrián en estos últimos tres años y también transmitió a las autoridades civiles presentes en el acto (entre ellos el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva; el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores) "mi disponibilidad para colaborar con ellas en todo lo que sea necesario y dentro de nuestras posibilidades".

En el aspecto militar, apostó por mantener "las mismas cotas de eficacia de la que siempre ha hecho gala la Brilat" apoyándose en tres pilares. El primero la "disciplina basada en nuestra humildad", el segundo "los valores morales basados en el espíritu de generosidad" y el tercero es la instrucción diaria. Señala que este último aspecto debe "constituir una auténtica obsesión para los jefes de unidad a todos los niveles desde el cabo al coronel". "Debemos ser orfebres de la instrucción diaria, esa será nuestra fuerza".

Romero Losada también confirmó lo ya avanzado hace unas semanas por el general Cebrián Carbonell y es el regreso de la Brilat a las misiones internacionales una vez finalizado su compromiso con la OTAN en 2018. Romero Losada señaló que esto sucederá "muy probablemente" al ser la Brilat "una de las unidades operativas mejor preparadas y que está a la vanguardia del Ejército Español".