El párroco de Santa María do Porto, David Mohedano, encabezó ayer la principal celebración del municipio en el Domingo de Ramos. Consistió en la bendición general, que tuvo lugar en la Praza do Reloxo y el desfile que rememoró la entrada de Jesús en Jerusalén.
Finalizado el rito religioso, los fieles acompañaron a la procesión hasta el Templo Nuevo, en una mañana de buen tiempo que animó a numerosos vecinos del municipio a sumarse a las celebraciones que dan continuidad a la Semana Santa marinense.
Ésta arrancó oficialmente el pasado viernes con la procesión de la Virgen de los Dolores, una de las imágenes que protagonizan la semana penitencial de la villa.
En el desfile religioso de ayer, además de los fieles con sus palmas y ramos de olivos, participaron los miembros de la Banda de Cornetas y Tambores Xente Nova, así como los integrantes de la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Concluida la celebración religiosa, no pocas familias aprovecharon las suaves temperaturas para disfrutar del vermú y/o del almuerzo en las terrazas y en general los establecimientos de hostelería marinense. Tampoco faltaron los que se animaron a desplazarse hasta las playas y disfrutar del buen tiempo frente al mar.
Los fieles y devotos tendrán la próxima cita penitencial el Jueves Santo con el oficio a medianoche de la Hora Santa y la procesión de las imágenes de la Virgen de los Dolores y Jesús Nazareno.
Al día siguiente están programados durante la mañana la Procesión de la Cruz y el Vía Crucis, que darán paso por la tarde al desfile religioso del Santo Entierro que recorrerá la villa ya en horas nocturnas. La Oración ante el Sepulcro y la Vigilia Pascual, por su parte, servirán de anticipo el sábado al Domingo de Resurrección.
