La portavoz del PP de Vilaboa, Beatriz Rosendo, lamentó la doble personalidad del gobierno local durante el pleno del pasado mes de marzo en el que "todo fueron buenas palabras" incluso con la aprobación de las mociones presentadas por el PP hasta la llegada del turno de ruegos y preguntas en el que la portavoz abordó el tema de la denuncia presentada por un vecino por prevaricación administrativa y que provocó la citación judicial del alcalde y el edil de Urbanismo.

Rosendo asegura que en ese momento el alcalde cambio la cordialidad por la "gresca" y que "quedó evidenciado que no le gustó" que se le preguntase acerca de esta cuestión. El PP lamentó que el gobierno local se volviese a escudar en la elevada carga de trabajo de la secretaria y considera que "las explicaciones dadas no son suficientes", las respuestas por escrito "imprecisas, inconcretas y poco claras".

"Ineptitud"

Desde el PP mantienen la petición de dimisión "independientemente de cómo acabe el procedimiento judicial". "Se tuvo un expediente paralizado más de cuatro años, y se reactivó el día que le llegó la citación judicial, quedando manifiestamente clara a ineptitud e incapacidad de Poceiro para gobernar este Concello", añadió la concejala del Partido Popular.