El líder de la oposición en el Concello de Poio, Ángel Moldes, el portavoz popular aclaró que existen "varios informes desfavorables de los técnicos, entre ellos uno que especifica que el concejal dio orden a través de una llamada y de un correo electrónico para frenar el proceso de contratación público y transparente".

Asimismo, Moldes pidió al BNG que "no mienta" sobre la supuesta prevaricación administrativa en la Festa do Mar de 2014. Según aseguró Moldes esta mañana, el grupo nacionalista trató de "engañar" a los vecinos en las explicaciones que dio ayer sobre el auto emitido por el Juez de Instrucción a Xosé Luis Martínez, concejal de Turismo, en el que le emplaza a acudir a declarar el 4 de mayo.

"Una prevaricación no es una falta administrativa como ellos dicen, sino un delito", recalcó Moldes, que manifestó que la intervención de ayer del BNG "no hace más que hacer que la desconfianza de los vecinos crezca", porque "es ridículo que aleguen que afecta solo a puestos de rosquillas".

De este modo, Moldes añadió que "el PP ni imputa ni acusa" y ni mucho menos "ha jugado sucio". "No entramos en la denuncia como parte interesada ni hicimos nada público cuando supimos que la denuncia iba hacia delante porque respetamos la presunción de inocencia", argumentó. Asimismo, Moldes destacó que "lo que el Partido Popular no podía hacer era ser cómplice".

"Si después de 22 años, el BNG cree que el Concello es su finca privada, nosotros tenemos que ser responsables", aclaró antes de añadir que no pedirán dimisiones porque respetan la presunción de inocencia, aunque consideran que el alcalde "también tiene responsabilidades" y espera que Ana Pontón "siga el mismo criterio que cuando solicitó las dimisiones de cargos del PP".