Comenzó a tramitarse en el Concello hace al menos siete años, a finales de 2009, y todavía sobrevive después de una larga crisis que se ha cebado especialmente con el sector inmobiliario. Se trata de una iniciativa privada para ejecutar 240 pisos en Campolongo (entre Fernández Ladreda, la sede de la Xunta y la ONCE sobre una superficie de 16.429 metros cuadrados.

La comisión municipal de Urbanismo analizó ayer la constitución de la denominada junta de compensación, una agrupación de propietarios de los terrenos cuya finalidad es reactivar este proyecto residencial, encabezar los trámites urbanísticos y ejecutar, en su caso, las obras, si bien por el momento no hay plazos para concretar la iniciativa.

En todo caso, la concejala de Urbanismo, Carmen da Silva, aplaudió ayer el esfuerzo de los propietarios (todos los implicados salvo tres) por relanzar el plan que fue iniciado en su día por una empresa promotora, que ya en 2010 presentaba el Plan Especial de Reforma Interior, que incluye el proyecto de delimitación y diseño inicial del futuro polígono.

Sin embargo, en estos años ya sufrió diversos contratiempos. En 2012 la Xunta informó negativamente el diseño por diversas deficiencias, y el pasado año se varió la Lei do Solo, afectando también al desarrollo de este futuro polígono. Su actuación ocupa 16.428,93 metros cuadrados en los que se habían diseñado cinco parcelas edificables (para levantar inmuebles de seis plantas), varios terrenos libres y zonas verdes y la apertura de una nueva red viaria en la zona que conectaría con las calles previstas en la recalificación de la ONCE, si bien este último proyecto acumula ya varios años de paralización total.

La documentación urbanística de Campolongo explica que se creará "un viario estructurante que relaciona y conecta el polígono con los viales existentes tanto en las traseras de Fernández Ladreda como en la avenida de Vigo".

El polígono contempla la creación de zonas verdes con una superficie total de 8.342 metros cuadrados, una parcela para equipamiento de 364 metros cuadrados, en la que se pueden construir 2.396 metros, y otros 4.380 metros cuadrados destinados al trazado de los viales. Los más importantes serían dos calles longitudinales a ambos márgenes de la urbanización, entre el edificio de la Xunta y Fernando II. En la zona habrá 479 plazas de aparcamiento, de las que 120 estarán en superficie y el resto en los garajes de los edificios.

El proyecto del PERI se presentó en su día a nombre de la sociedad limitada "Promociones Pelete y otros", dado que el polígono está repartido entre 14 propietarios.