Diecisiete alumnos del IES Valle Inclán jugaron ayer al Goalball, el único deporte paralímpico creado para personas ciegas o con dificultades visuales. Unas gafas opacas les impedían completamente la visión en una experiencia organizada por el centro docente y la ONCE que les permitió enfrentarse al miedo de lesiones, a pesar de utilizar protecciones, a la desorientación o no controlar la fuerza.
La profesora Ana Santos explica que "fue una experiencia muy estimulante, muy enriquecedora" que se enmarco en el proyecto europeo Erasmus+Yes, dedicado al mundo del deporte desde la perspectiva física, mental y nutricional. El taller fue impartido por Sandra López Calvo, maestra especialista en Educación Física de la Once.
Los jóvenes utilizaron manos y pies para verificar las líneas del campo, marcadas por una cinta y una cuerda, y el partido debe caracterizarse por el silencio para facilitar la evolución de los jugadores. Sandra López explica que uno de los retos fue correr hacia la fuente de sonido porque "resulta complicado mantener la intensidad de la marcha cuando se les tapa los ojos, además son más conscientes de la inseguridad".
