La caída casi constante del precio de la vivienda se deriva en buena parte de la escasa demanda que se registra en la ciudad y de las dificultades para obtener financiación. Todo ello supone, además, una nula actividad de promoción de nuevos edificios, prácticamente paralizada en la ciudad desde hace años, como se pone de manifiesto con grandes bolsas de suelo vacías en Tafisa, Eiriña y, Valdecorvos, entre otros puntos.
En los dos primeros casos no hay actividad alguna y en Valdecorvos, su propietario, Xestur, tiene solo dos parcelas ocupadas, tres en reserva y dos a la venta: uno de 1.147 metros cuadrados que se ofrece por 1.636.810 euros y otro de 1.990 metros cuadrados y más barato, a razón de 327 euros por metro, para un total de 652.145 euros.
Mientras tanto, la demanda de vivienda en la comarca permanece estancada desde hace meses y el Registro oficial de demandantes de la Xunta suma en los 14 municipios de la comarca poco más de mil familias anotadas, en su inmensa mayoría residentes en la capital. Es prácticamente el mismo número que hace seis meses y desde entonces se ha constatado que las peticiones se han reducido de forma sistemática en casi todos los casos.
Además, en municipios como A Lama, Campo Lameiro y Portas el número de solicitudes es cero. De hecho, hace seis meses toda la demanda de la comarca superaba el 10% de Galicia y ahora apenas llega al 9%
