La Asociación Pola Defensa de la Ría de Pontevedra (APDR) alega contra el proyecto para crear un paseo peatonal a lo largo de la autovía de Marín porque "entra en contradicción con la aspiración de recuperar la zona que hoy ocupan infraestructuras viarias" como la propia autovía y las empresas Ence y Elnosa. El colectivo entiende que esa senda "dificultaría la recuperación de nuestras playas urbanas y el banco marisquero" existentes hace décadas.

Además, APDR encuentra distintos defectos en el proyecto propuesto, entre ellos el hecho de que el paseo finalice en Placeres, "cuando el lógico sería llegar hasta Marín, o que en el último tramo compartan espacio ciclistas y peatones".

También cuestiona los materiales previstos, "aluminio y pavimentación con material sintético imitando la madera, junto a elementos de hormigón de color semejante a la madera".

Por otra parte, apunta que "la pasarela proyectada se va a construir sobre el borde marino utilizando una cimentación a base de pilotes apoyados en el fondo del mar, lo que puede provocar problemas ambientales, tanto por el movimiento de materiales del sedimento, como por la más que posible existencia de rocas que como se admite en el proyecto- tendrán que romperse mecánicamente, lo que supone un claro incidente en medio".

A su juicio, "este proyecto deja en evidencia más una vez el absurdo de mantener en esta zona a Ence y a Elnosa, que interfieren en el desarrollo urbanístico de Pontevedra y Marín, y que lleva a la administración a realizar proyectos con los que se pretende solventar problemas que, de no ser por esta realidad, podrían ser resueltos sin necesidad de afectar al medio natural".

Por ello, Defensa da Ría solicita la retirada del proyecto y que Costas opte por anular las concesiones industriales en Lourizán "para solventar todos los problemas de forma adecuada".