El Concello de Poio solicitará este mismo verano que se declare a la Playa de Raxó como "apta para el baño" si los análisis efectuados por la Xunta entre finales de mayo y principios de junio "son positivos". La idea del Consistorio pasa por "no contar con la recomendación de no bañarse en esas aguas durante todo el 2017, porque sería llevar a cabo una sanción con efecto retroactivo", como explicó el regidor , Luciano Sobral.
Según el alcalde, la calificación de "aguas no recomendadas para el baño" impuesta por la Consellería de Sanidade a finales de 2016 llegó porque durante varias temporadas consecutivas, se habían registrado más análisis negativos que positivos. Sin embargo, el Concello entiende que si en los primeros análisis no existen rastros de contaminantes, la recomendación de aguas no adecuadas para el baño debería ser eliminada. "Reclamaremos porque así sea, porque sino, nos estarían perjudicando a todos", recalcó Sobral.
A día de hoy, el Concello lleva a cabo análisis quincenales en el riachuelo que vierte directamente a la playa. "Los datos que obtenemos son mucho mejores que antes. Eso demuestra que se ha hecho un buen trabajo a la hora de localizar los puntos contaminantes, aunque siguen existiendo pequeños niveles de fecales que tenemos que subsanar", expuso el máximo mandatario.
Semana Santa
Para Luciano Sobral, los actuales parámetros permitirían ya "una calificación como apta para el baño", aunque sin llegar a los mínimos exigibles para considerarla "excelente", como sí ocurre en otros arenales próximos. Pese a ello, el jefe de gobierno municipal garantizó que las aguas no son, ni mucho menos, insalubres: "La corporación garantiza al 100% que no existe riesgo alguno para la salud. Todo el que quiera puede darse un chapuzón ya en Semana Santa. La playa permanecerá abierta todo el año y en la temporada de verano veremos si hay que colocar el cartel indicativo o no. Nuestra idea es que no tenga que ser así".
A día de hoy, los servicios municipales ya han encontrado "y subsanado" muchos puntos individuales que vertían al riachuelo aguas contaminadas. "La colaboración vecinal está siendo buena", reconoce el resposable de Medio Ambiente, José Ángel Lodeiro. Sin embargo, todavía se trabaja en una tubería de pluviales en la Avenida da Toxa para descubrir qué está virtiendo y contaminando a la cañería que desemboca directamente en Raaxó.
