Aunque los patrones mayores salieron de esta jornada de trabajo con una visión, en general, positiva, acerca de las técnicas que se van a emplear para el dragado del Lérez; esto no va a impedir que algunos de los pósitos vayan a presentar alegaciones al mismo, como confirmaron cofradías como la de Portonovo o Bueu. Tal y como señaló el propio patrón mayor de Portonovo, se trata, en cualquier caso de aportaciones para "intentar mejorar el proyecto" y asegura que fueron los propios técnicos de Portos los que les animaron a plantear las propuestas por escrito para su posterior análisis e incorporación, en su caso, al documento definitivo.
Actualmente el proyecto se encuentra a exposición pública y el plazo para presentar alegaciones finaliza el 22 de febrero.
En dicho proyecto se detalla que la retirada de lodos afectará al canal de navegación del río, tendrá un plazo de ejecución de un año y costará más de tres millones de euros. La fecha posible para su ejecución sería el año 2018. Lo que piden las cofradías del fondo de la ría es celeridad. Carmen Vázquez, patrona de Lourizán, entiende el "temor" que pueda haber en distintos sectores por la afectación que pueda haber a otros bancos ahora productivos tanto de navajas como de otros bivalvos, pero insiste en que, tras adoptar todas las medidas preventivas necesarias, es urgente llevar a cabo el dragado cuanto antes dado que cada vez son más las zonas que corren el riesgo de ser improductivas por el avance de los sedimentos.
