Voluntarios, trabajadores y personas que participan habitualmente en las actividades de Cruz Roja se sumaron a mediodía de ayer al minuto de silencio convocado en todas las sedes de la organización humanitaria en España en repulsa por el asesinato de 6 miembros del Comité Internacional de la Cruz Roja en el ataque a un convoy humanitario en Afganistán.

Otros dos miembros de Cruz Roja desaparecieron en este ataque al convoy de reparto de ayuda humanitaria, producido en el norte del país y que supone la peor tragedia para Cruz Roja en sus 20 años en el país afgano.

Conmocionados, los integrantes de Cruz Roja reiteraron que es "inaceptable que tantos civiles sigan siendo asesinados y heridos" y que las partes en conflicto han de cumplir el derecho internacional, de modo que los trabajadores y voluntarios humanitarios puedan prestar asistencia vital donde sea necesario sin temor a perder sus vidas.