Las obras del Eje Atlántico ferroviario incluyeron en su día un falso túnel ante el barrio de A Seca, para ocultar las nuevas vías. Se habilitó así una amplia explanada que desde hace años permanece vallada y sin más uso que el "botellón" de los jóvenes, según Rodríguez Teso, que reprocha al gobierno local el retraso en el acondicionamiento de esa y las otras dos pasarelas sobre el tren ejecutadas en su día: la de Doce de Novembro y la de Médico Ballina.

Hace casi un año que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) cedió al Concello el uso de esos espacios pero los numerosos anuncios para crear en ellos parques infantiles, espacios deportivos y otros lugares de ocio nunca llegaron a concretarse.