El Tribunal Supremo acaba de confirmar la validez de las sentencias emitidas en su día por el juzgado de primera instancia número 2 de Pontevedra y la Audiencia Provincial de Pontevedra en las que se concluía que la empresa Construcuatro había invadido una finca particular en la construcción de un inmueble en la avenida de Vigo. Con esta decisión, el Alto Tribunal ratifica que la constructora deberá pagar una indemnización a los verdaderos titulares de aquellas de 1.128.160 euros.

Este litigio judicial se inició cuando la familia Vázquez Rebollar, titular de los terrenos invadidos, reclamó ante el juzgado de primera instancia número 2 por la supuesta usurpación de los terrenos.

Este juzgado concluyó que la constructora era propietaria de 13.538 metros cuadrados de terreno pero que no podían urbanizarse debido a la existencia de dos parcelas que cegaban lo que sería una de las fachadas del inmueble. El juzgado también concluyó que estas dos parcelas, propiedad de los denunciantes, fueron "invadidas" por la empresa constructora mediante una alteración de lindes que incluyó en el total de la propiedad de la constructora estas dos parcelas en litigio.

Así, condenó a Construcuatro a pagar 1,1 millón de euros en concepto de indemnización a los propietarios además de los intereses legales correspondientes. La empresa constructora presentó recurso de apelación ante la Audiencia, pero la Sección Primera confirmó la sentencia de primera instancia. Tiempo después planteó un nuevo recurso ante el Supremo que ahora acaba de resolverse confirmando las dos anteriores sentencias dictadas por los magistrados pontevedreses.