Mayte Ramírez se encontraba ayer por la mañana en el futuro local de "La Moda Ideal", en la calle Manuel Quiroga. "Necesito ir avanzando. Va a ser una minimoda. Van a ir de madera las estanterías, los mostradores, todo?", explica en un descanso con los operarios de la obra.
"Allí se quemó todo, las telas, equipo de música, escaleras, todo? tengo que empezar de cero", asegura. "Desde el minuto cero supe que aquello había terminado, que lo hecho hecho estaba. Ahora, la felicidad es poder volver", dice esperanzada.
El nuevo bajo es de su propiedad. Lo compró en la década de los noventa, pero lo tenía alquilado. "El 1 de octubre supe que los inquilinos se mudaban y ya me planteé abrir aquí de nuevo", afirma.
Mayte Ramírez llevaba 32 años al frente de "La Moda Ideal", un negocio con más de un siglo de antigüedad que heredó de su tío abuelo.
"Últimamente, estábamos solo un empleado, José, y yo. Llevaba ocho años conmigo. Era de Perú y al final se tuvo que ir a su país con su familia. En principio empiezo sola porque no puedo permitirme tener empleados. Al menos un par de años", asegura.
"La clientela me daba el pésame cuando se incendió. Una vez que supieron que iba a abrir ya me felicitaban y me daban besos y abrazos. Ahora me preguntan cuándo abro. Me dicen que me esperan y vienen por aquí", dice feliz.
"Yo necesito estar entre las telas, porque si no me da algo", reconoce la comerciante.
