El Concello de Poio asegura que la Xunta solo subvenciona el Centro de Información a la Mujer (CIM) de la localidad con un 50% de los gastos de personal que éste tiene. Según el Consistorio, de los 90.000 euros anuales que se destinan a esta partida, la institución autonómica tan sólo aporta 45.000, pese a que la competencia es exclusivamente suya.

La denuncia por parte del ente municipal surgió ayer durante la discusión del último punto del día del pleno, en el que el PSOE solicitaba elevar a la Xunta la petición de creación de una red de financiación "continua y estable" para la mayoría de concellos gallegos, ya que éste es un servicio "de competencia autonómica" y, por tanto, "así debe hacerlo el gobierno gallego".

Tras la exposición de la concelleira de Benestar e Igualdade, Rosa Fernández, el bloque popular criticó la inclusión de esta moción en el orden del día como una propuesta "partidista y encomendada desde el PSOE regional" y que tiene su origen en el cierre del CIM de Ponte Caldelas. En ese sentido, la edil Rocío Cochón recalcó que "cualquier ayuda es poca para la violencia de género", aunque varias voces de su partido aludieron a que esta moción lo único que abría era el debate sobre si "Poio va a cerrar su Centro de Información a la Mujer".

Ante ello, el bloque socialista criticó la actitud popular, encaminada a "hablar antes de preguntar sólo para hacer ruido mediático". Asimismo, también destacó que el partido de la oposición se había dedicado a "vender" que existía la posibilidad de que Poio estuviese interesado en dejar de prestar ayuda en su CIM, algo "completamente falso". "Lo único que exigimos es una red de financiación completa y continua, porque lo que no puede ser es que un Concello esté pagando la mitad de un servicio que no es competencia suya mientras que la Xunta aporta la otra mitad, pero la gran mayoría con fondos europeos", expresó Gregorio Agís.

En este sentido, el concelleiro de Promoción Económica ilustró su argumentación alegando que de los 90.000 euros necesarios, la Xunta pone directamente "10.000", ya que los otros 35.000 proceden de Europa, unos fondos a los que sólo el ente autonómico puede acceder. Agís recordó que el CIM de Poio ofrece servicios a personas ajenas al municipio porque "así lo pide la Xunta, aunque luego no colabora".

Por su parte, el concelleiro de Facenda, Xulio Barreiro, recalcó que había que ser muy "caradura" para criticar que el Concello tenga facturas sin pagar "por falta de crédito, pero no decir nada cuando éste tiene que abonar prestaciones que no le competen". "Ante esta situación sólo queda retirar prestaciones de otro lado, y eso únicamente perjudica a los vecinos. Por tanto, que tengan claro que de momento y mientras podamos, el CIM seguirá. Aunque necesitamos que la Xunta sea fiel a sus competencias de una vez por todas", finalizó Barreiro.